Estaba deseando escribir este post para contarte que este mes es diferente para mí.
¿Lo es también para ti?
Mayo promete ser una oportunidad para volver a empezar, para apostar una vez más por un sueño y para emprender de nuevo el camino con alguna lección aprendida.
Estoy diseñando una nueva web donde kilim, alfombras, tú y yo tengamos un lugar de encuentro mucho más cómodo. Donde también abrir las miras con nuevos proyectos que me llenan de vida pero conservando la esencia.
Llega tiempo de un poco de silencio y mucho trabajo intenso.
Nuevas sensaciones me acompañan en estos tiempos de cambio y transformación. Un suave cosquilleo continuo me recuerda constantemente que lo que antes valía, quizás hoy ya no. Rutinas, personas, momentos que ayer eran importantes hoy ya no encajan. A veces, me siento una equilibrista en una cuerda floja intentando balancear lo que debe ser con lo que me gusta ser.
Pero estoy segura que este proceso de cambio encierra un gran aprendizaje y que la calma llegará. Ahora ni siquiera encuentro las palabras para poner en orden tantos pensamientos en mi cabeza pero cuando menos lo esperé, sé que todas las piezas encajarán.
Echo de menos las tardes tranquilas, las siestas largas, eso llamado confort…pero ahora es tiempo de construir un sueño. Tiempo de aprender a priorizar, de saber esperar, de escucharme, de eliminar el ruido y como dice Mamen de “despojarte de lo que crees que eres porque llevas toda la vida repitiéndotelo”.
No siempre es fácil, pero creo que estoy empezando a fluir con los acontecimientos, a disfrutar de lo que viene, con algún tortazo de por medio, pero eligiendo vivirlo de manera positiva. En medio de esta locura quiero encontrar el sosiego necesario para dejar que este proyecto fluya con naturalidad, disfrutar de las nuevas rutinas y vivirlo de manera plena.
Solo así, seguiré adelante.
Estoy deseando contarte todo lo que se está cocinando en azul bereber. Quizás el nuevo logo te dé alguna pista.
Gracias por estar aquí.
Anabel.
Anabel.